Cuando analizamos los hermosos versos del sagrado Pop Wuj acerca de la Creación de la mujer Maya en el Urox Tanaj (capitulo 3) que dice: Entonces existieron también sus esposas y fueron hechas sus mujeres. Ajaw mismo las hizo cuidadosamente, Y así, durante el sueño, llegaron, verdaderamente hermosas, sus mujeres, al lado de B’alam-Quiché, B’alam-Akab, Majucutaj é Iki-B’alam.
Allí estaban sus mujeres, cuando despertaron, y al instante se llenaron de alegría sus corazones a causa de sus esposas.
He aquí los nombres de sus mujeres: Cajá-Paluná, era el nombre de la mujer de B’alam-Quitzé; Chomijá se llamaba la mujer de B’alam-Akab; Tzununijá, la mujer de Majukutaj; y Kakixajá era el nombre de la mujer de Iki-B’alam. Estos son los nombres de sus mujeres, las cuales eran Señoras principales. Ellas y ellos engendraron a los hombres, a las tribus pequeñas y a las tribus grandes, y fueron el origen de nosotros los Mayas.
A través de estos versos podemos ver claramente como sucedió el comienzo y principio de la mujer Maya, nos dice que nuestras primeras madres fueron hechas cuidadosamente por el Ajaw (ser supremo) y que las hizo verdaderamente hermosas, y que al ver nuestros primeros padres a sus hermosas esposas se llenaron de alegría sus corazones.
También vemos en estos versos de nuestro sagrado libro cuatro bendiciones importantes para la mujer como para el hombre también.
Primero vemos: Que la mujer Maya fue hecha por el Ajaw cuidadosamente, una poderosa declaración que nos traslada a la etimología de la mujer, y el cual nos dice: Que la mujer no es obra de la casualidad, ni cosa del destino ú ordinaria alguna, sino que nada más, ni nada menos que ella es: HECHURA CUIDADOSA DEL CREADOR Y FORMADOR.
Una identidad divina y sobrenatural que toda mujer debe tenerlo muy en cuenta en su vida para que eleve su espíritu y su autoestima; que una de sus grandes bendiciones es que ella es una obra maravillosa, majestuosa, única, especial y cuidadosa del Ajaw Tz’akol y B’itol.
Segundo: Que el Creador y Formador al formar la mujer, la hizo hermosa, preciosa, bella, encantadora, jovial y brillante; en otras palabras, la mujer por voluntad del Ajaw desde el principio fue asociada con la hermosura, con la preciosura, con la belleza y el encanto divino y natural que la caracteriza.
Lo que esto nos enseña es que la mujer Maya es una joya, es una perla, es una reliquia valiosísima que hay que tratarla con mucho cuidado.
A menudo mucha gente nos pregunta. ¿Porqué las mujeres Mayas se cubren con demasiada ropa?, ¿Por qué no son iguales a las mujeres de las sociedades modernas con poca ropa?
Algunos responden a estas preguntas que la razón el por qué la mujer Maya usa vestimenta modesta es para evitar la tentación a los hombres.
Mientras este puede ser el caso en otras religiones, pero para la cosmovisión maya esto no es cierto. La vestimenta modesta en la cosmovisión maya no tiene que ver con cómo otra gente ve a las mujeres, sino cómo las mujeres se ven a ellas mismas, como se sienten ellas mismas, como se aman, como se valoran y se estiman y se dan a respetar a ellas mismas.
Cubrir algo no siempre significa avergonzarse de ello.
¿Alguna vez se ha dado cuenta de cómo los Ajq’ijab’ tratamos el Pizom Gagal envoltorio sagrado Maya?
Nunca lo dejamos abierto. Está oculto en muchas capas de ropa. El Pizom Gagal de cada Ajq’ij se mantiene adentro de un lugar secreto, en una caja, detrás de una cortina, envuelta en un Sut muy especial, y cerrada con un cinturón.
Solamente se saca para propósitos santos, para ser leída y usada durante una ceremonia muy especial. Para esos momentos especiales, cuidadosamente corremos la cortina, abrimos las puertas y sacamos esa cajita o envoltura sagrada, la descubrimos y la desenvolvemos. Tan pronto como hemos terminado de apreciarla, respetarla y usarla, inmediatamente la volvemos a cubrir y la guardamos.
¿Por qué hacemos todo esto?, ¿Por qué tanto lío para ocultar el Pizon Gagal envoltura sagrada Maya?, ¿Estamos avergonzados de ella?, ¿Hay algo que ocultar?, ¿Hay algo horrible sobre el Pizon Gagal envoltura sagrada? Por supuesto que no. Más bien, todo lo contrario.
Siendo que el Pizon Gagal envoltura sagrada es nuestro objeto más sagrado, especial y precioso, nunca lo exponemos innecesariamente. Lo mantenemos cubierto porque no lo queremos tratar “a la ligera”, no queremos ser demasiado “casuales” con él. Si la envoltura sagrada siempre estuviera visible y abierta, entonces nos sería demasiado familiar, y no la respetaríamos tanto.
Al mantenerla fuera de la vista, y trayéndola solo en tiempos apropiados, mantenemos nuestra reverencia y respeto por el Pizon Gagal envoltura sagrada.
Lo mismo es con nuestros cuerpos. El cuerpo es una creación sagrada del Creador y Formador. Es la morada sagrada del alma. La manera en la que mantenemos respeto por el cuerpo, es a través de cubrirlo. No porque nos avergüenza, sino porque es muy bello y precioso.
Esto es cierto para los cuerpos de los hombres también, y la vestimenta modesta también se aplica a ellos. Pero es más en el caso de las mujeres. El cuerpo femenino tiene una belleza y un poder que sobrepasa por lejos al masculino. Los Nim Etamnel Winaq (Sabios) enseñan que el cuerpo de la mujer es de una belleza más profunda porque su alma viene de un lugar más elevado.
Por este motivo, su cuerpo debe permanecer discretamente cubierto.
Pero en un mundo actual en donde el cuerpo de la mujer se ha reducido a propaganda barata, no precisamos prueba alguna sobre la veracidad de esta sabiduría. Cuando todo está expuesto, nada es sagrado.
Pero aquello que es verdaderamente precioso para nosotros, lo mantenemos envuelto, la mujer Maya es una reliquias que tenemos los Mayas, por eso ellas deben de estar cubiertas con ropa modesta, bonita y especial para ser descubiertas únicamente por su Creador y Formador y para sus esposos si es que están casadas.
Tercero: Que la mujer Maya por su estructura y su hermosura regalos dados por el Ajaw es la que llena el corazón del hombre de alegría, pero no solo de alegría, sino del sentimiento más puro y poderoso que es el amor.
De ahí que nuestros sabios declararon que el B’elejeb B’atz, es también el día del amor, el día de la hermosura y el día de la belleza, y el día indicado para que todos los solteros que quieran formar un hogar, pidan ante el Creador y Formador en B’elejeb’ B’atz, una buena esposa, una buena mujer, una buena compañera para amarla, respetarla y protegerla toda la vida.
Porque la causa de la Creación de la mujer fue el hombre, ella fue creada para bendecir al hombre como ESPOSA, lo que esto nos lleva a otra gran enseñanza para las mujeres y hombres Mayas casados de que el papel y propósito de la mujer hablando de las casadas es el de ser ESPOSAS, no la madre, ni la empleada, ni la profesional sustentadora de la familia y del hombre. NO. Sino la de ser una buena ESPOSA.
Y Cuarto: Vemos también en los versos del Pop Wuj, algo muy importante para el hombre y la mujer para que sea feliz en su vida; es que dice claramente: Que el Ajaw hizo solo una mujer para cada uno de sus hijos, no hizo dos, ni tres, ni cuatro mujeres para cada uno de ellos; sino: UNA MUJER, lo que esto enseña que el hombre Maya debe tener una sola mujer, y la mujer Maya debe tener un solo hombre; y que el hombre que posea más de una mujer, y la mujer que permita tener más de un hombre en su vida; ésta cometiendo Nimlaj Mackaj (Gran pecado) ante el Creador y Formador, y que esta fuera del orden de nuestro Alom y Kajolom (el Padre y la madre).
La verdadera felicidad del hombre y de la mujer Maya, según el sagrado libro está en tener una sola mujer para el hombre, y un solo hombre para la mujer Maya, y el mantener este gran fundamento del Creador y Formador en nuestra vida, en nuestro hogar es sinónimo y garantía de éxito y prosperidad familiar y matrimonial.
Estas cuatro bendiciones y muchas otras razones más, es la que hace que el B’elejeb’ B’atz sea un día muy especial e importante por las grandes energías cósmicas liberadas por el universo en ella, por eso que en este día se realizan actos y ceremonias ante el Ajaw, para dar gracias por la Creación de la mujer Maya, y pedir por la fertilidad, el bienestar y la salud para todas la mujeres, además se pide por todas las mujeres embarazadas, las enfermas y todas aquellas que buscan tener hijos o aspiran prosperidad familiar.
Esta celebración se ha hecho por miles de años cada 260 días y ha servido para mantener la unión y la integridad de las familias Mayas y para mantener los principios fundamentales de nuestra cosmovisión que son el respeto y la honra hacia nuestros padres y nuestras madres y ancestros.
Que estas cuatro bendiciones sean para usted mediante celebre y festeje a todas las mujeres de su casa, de su familia este próximo B’elejeb’ B’atz, 12 de Junio 2024 en todos los altares y lugares sagrados Mayas más cercanos a usted.
Aré ri Q’jaw Ucux Kaj, Ucux Ulew Ka tuychinla y ka tuychinic juntir ri I’xokib’ rech ka siwan tinamit Mayib. (Que nuestro Ajaw Corazón del cielo, Corazón de la tierra le bendiga y bendiga a todas las preciosas mujeres de nuestro gran pueblo Maya).
Nimlaj Kikotemal B’elejeb B’atz’ chech’ alaq’ Nan, Alí, altomab’, Q’atit Q’a mam. (Felicidades abuelitas, madres, niñas y señoritas en su gran día B’elejeb’ B’atz’.
Sinceramente: www.MayaTecum.com el Ajq’ij y Ajtij del pueblo Maya.